viernes, 31 de octubre de 2014

El Tiro por la Culata

¿Viste cuándo haces planes y planes y esquemas mentales y prevés todas opciones, posibles reacciones y aún así nada te prepara para que las cosas salgan mal? Bueno, así me pasó el lunes pasado. Exactamente luego de dos meses de una mala noticia, nos desayunamos con un segundo negativo. Ok, de las parejas infértiles que me rodean, dos quedaron embarazados en su primer in vitro y otra en la segunda. Parece que a nosotros nos toca estar siempre en las estadísticas que van para atrás así que no puedo evitar sentirme bastante fastidiosa. Para variar, ni siquiera hay reembolso de cliente disconforme, ni seguro contra todo riesgo que contemple mi destrucción total. Sólo queda, seguir intentando.
Cuando pasamos el primer negativo y empecé a ver un poco la luz y a tener esperanzas nuevamente, me dije a mi misma que había cosas que trataría de cambiar. Tal vez un poco de cábala, un poco de atajemonos antes de tiempo.
Empecé terapia, lo cual me brinda un espacio para descargar bastante, empecé a hacer ejercicios de respiración y meditación que me ayudaron bastante con la espera y ansiedad de cada ecografía, nunca deje de correr/caminar para hacer algo de ejercicio y decidí no publicar detalles del tratamiento para no quedar tan expuesta como la vez anterior, cuando me desperté en bolas adelante de todo el mundo. También prometí NO Googlear nada de nada durante la betaespera y no contar los días para bajar la ansiedad.
 Y sí, tengo que admitir que alguna que otra vez, perdí los estribos (quién no? Con la cantidad industrial de hormonas que te clavas día a día) pero en líneas generales llegue mejor al día de la beta. La preparación fue más sencilla, me ahorré pinchazos y punción (y dinero, claramente), la mitad del tratamiento, pero también corríamos el riesgo que de los cinco óvulos congelados (los embriones anteriores jamás llegaron a estadío blastocito y se descartaron) no se formara nada viable y eso me sacaba un poco que quicio. Finalmente, se formaron dos blastocitos, celu bebés de alta calidad, e hicimos un proceso llamado Assisted Hatching para fomentar la implantación.  No lo podíamos creer! El médico estaba más optimista y así también nosotros y no era para menos. Ahora sí le vamos a dar
en el blanco!!
Como ya no era más virgen invitrante, la betaespera no se me pasó a cuentagotas, sino volando, porque quería evitar pasar por eso de nuevo. En vez de ansiedad, sufría terror de volver a  pasar por esa experiencia. Mucha terapia y meditación de por medio logré un estado en el cual no pensaba en ningún resultado. Sí, se puede, no me pregunten cómo. Tuve pocos síntomas y la hinchazón, mareos y molestias ya sabía que eran producto de la chotada de la Progesterona así que no me puse paranoica en absoluto.
Pero unos días antes de la Beta empecé con mis típicos síntomas premenstruales y ahí arranqué con la maquinola: seré de las que tienen síntomas de indisposición, se deprimen y luego reciben un negativo? Serán síntomas de implantación mis dolores de ovarios? No, no, yo sabía que no era casualidad, una voz interna me decía que esta no era nuestra vez e instintivamente asumí lo peor sabiendo que no había chances que suceda. Me rendí, tomé fernet e ibuprofeno y todo. A ese punto asumí el negativo antes de tiempo y no me equivoqué. Empecé el duelo y hasta recibí yo misma la noticia con madurez. Igual, escucharlo, fue una cachetada durísimo igual a la primera eh!
Ahora, no me malinterpreten porque de superada no tengo nada. Si antes no entendía nada, ahora llevo días en estado constante de "recalculando". No sé qué hacer, qué pensar o qué sentir. A veces lloro, a veces me olvido y hago de cuenta que soy normal, a veces me enojo y a veces me apago completamente.

Tal vez no creo en  Dios lo suficiente...
Tal vez no seré una buena madre....
Tal vez no aprendí lo suficiente todavía...
Tal vez son todas las maldades que le desee a otras embarazadas....
Tal vez tengo mala suerte en la fertilidad pero buena suerte en el juego...
Tal vez mi misión en la vida sea otra...

Tantas dudas, tanta frustración, tanto dinero y esfuerzo, tanta energía y positividad para que no funcione de nuevo. No creo que haya sido en vano, no creo que dé lo mismo, y SÉ que de alguna forma u otra lo vamos a lograr pero hoy es muy difícil ver ese final. Sé que nos levantaremos, que nos tomaremos tiempo para procesar esto, fortalecernos, recomponernos y armarnos de fuerza para otro intento. Sé que hay parejas con peores pronósticos que lo han logrado y sé que todavía hay una luz de esperanza adentro nuestro, al fin y al cabo ya pasamos por una y sobrevivimos así que para no perder la costumbre, seguiremos luchando!

PD: Agradezco de corazón y con el alma cada palabra de aliento y fuerza de la #infertilpandy que me llegaron. Sinceramente, no sé qué haría sin ustedes!


3 comentarios:

  1. Nena!! Q gran manera d afrontar todo!! Solo decirte q Si, q serás buena madre,eso nunca lo dudes, q te lo mereces tanto como esas embarazadas q dices...todas pecamos de un poco envidiosillas...jijijiji
    Un besazo

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  2. No sabes cuanto te entiendo, parece que estas en mi mente aunque estamos a miles de kilometros...
    Los negativos son tan horribles...tanto!
    Yo llevo 2 negativos fiv y es una puta mierda, pensar que nunca eres tú, que hagas lo que hagas, el esfuerzo que sea, a ti no te funciona :(

    Yo estoy en otro TRA ahora, estoy aterrada por recibir otro no más.

    Solo decirte que te mando todo mi apoyo, que nos tenemos que apoyar entre todas y que no se cuando ni como pero algun puñetero dia ese positivo tiene que ser para nosotras.

    Un abrazo guapa

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  3. Uuf... te entiendo tanto!

    Muchas fuerza...

    Un abrazo enorme!!

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