FIV Crush - Episodio 3: Transfer

Muchas cosas raras pasaron en estos días... Muchas emociones, dudas, certezas, todo junto... Supongo que es bastante común pero ayer vivimos la cresta de la ola. Yo venía bastante tranquila y me levanté llena de energías, a pesar de las molestias en los ovarios e hinchazón, el doble de Monica Geller se apoderó de mi. Limpié toda la casa, acomodé todo en su lugar, me depilé, me hice las manos, las uñas, exfoliación, baño de crema, me planché la ropa, me maquillé y perfumé. En otras palabras, me puse linda y a mi casa para recibir a mis embriones. Era un día más que especial y veníamos preparándonos para este momento.
El sábado (dos días antes) habíamos recibido la noticia que de los 9 óvulos, sólo habían fertilizado 6, lo cual implica una respuesta bastante baja, ya que no todos mis Huevitos eran buenos. Había que esperar a que sigan incubando en esos hornos que me mostraron a ver cómo evolucionaban. Según su calidad, los embriones se dividen en cuatro tipos. Los tipo 1 se tiran y el resto sirve pero en distintos grados. Lo único que pensaba cuando fui a la transferencia era "por dios que haya algo para poner."
Me tomé el Sarmiento y fui tranquila a la clínica, y fue ahí cuando empezaron a caer las lágrimas. Me agarró un ataque de llanto. "Y si no hay nada bueno?" "Y si no quedo?" Ya fue, pensaba, me bajo y me voy para el otro lado. Le mando whatsapp a mi amor y me llama enseguida. Menos mal que me calmó, porque estuve a minutos de convertirme en infértil fugitiva.
Llegamos a la clínica y fue el día que menos tuvimos que esperar. Menos mal, porque eso eso de aguantarme ir al baño, podía llegar a tener malas consecuencias. Sólo me podía concentrar en NO hacerme pis. Lo malo fue que tuve que entrar sola al quirófano y mi marido me tuvo que esperar afuera. Malísimo este sistema!!! Ellos que tanto nos soportan se pierden de lo más lindo de todo este proceso... Yo ya estaba en mi mejor posición ginecológica, apretando las medallitas y ahí viene el médico y me da el parte embrionario:
 "Bueno, Cecilia, de los seis embriones, hay tres de calidad 3 (vamos carajo!), uno calidad 2 y dos calidad 1. Me dice el biólogo que siendo vos tan joven y teniendo tan baja respuesta a la fertilización, que recomienda poner tres"
"OK, no hay problema" le dije yo " poné todos por mi y que prenda algo"
 "NO, es muy riesgoso. Si quedas embarazada de trillizos, es tu vida, es patológico. Sos joven, si tuvieses 40, lo hago pero aún, así que te embaraces no siempre depende de la calidad y no me quiero arriesgar. Pongamos los dos mejores y nos quedamos tranquilos."

Buuuuu, médico mala onda... Pensé. Pero me dio alivio saber que al menos todo nuestro esfuerzo habían dado sus frutos. Entonces, me mostró las fotitos de nuestros celu-bebés y aún los que se veían medio deformes (claramente la clasificación se veía a la legua) y los perfectitos me daban una ternura inexplicable por igual.

Ahí se apagaron las luces y prendieron el ecógrafo y el médico me iba explicando todo. Ahora te voy a limpiar, ahora voy a hacer una prueba, ahora va la cánula. Yo no despegaba los ojos de la pantalla. "Y ahí van los embriones" y se veía la cánula y el endometrio perfectamente, y de repente, se vieron dos pelotitas ínfimas que se movían y llegaban hasta ahí y se quedaban. "Ves esa marchita blanca acá?" Me señala el doctor... Las lágrimas se me caían, estaba muda y pensaba por qué no está mi amor acá conmigo!!!?? "Si, ahí están... Y se quedan ahí carajo!" No lo pude evitar y la maestra se apoderó de mi, desde el embrión ya los estoy cagando a pedos, pobrecitos...
No creo hasta el día de hoy que haya vivido un momento más sublime que éste. No puedo describir con palabras lo que sentí por esos dos puntitos que se movían...¿Cómo puede algo tan pequeño hacerme sentir tanto amor? Si alguien duda del milagro de la vida, esto lo es. Pensaba que afortunadas somos todas las infértiles en poder ser testigos de esta mágica concepción. Y luego pensaba en los puntitos, tan chiquitos, tan indefensos. Ya los quiero con el alma, ya son mis hijos, ya los deseo cuidar con todo mi corazón, ya sé que los reté pero es que los esperamos tanto... Por favor, mis porotitos, aferrense a mi casita y  quédense con nosotros para siempre!!!